La cumbre Mexico, Canada y EU, opacada por el atentado frustrado contra Calderón

Tuve conocimiento que Felipe Calderón evalúa desaparecer con todo y su burocracia a 2 secretarías: Reforma Agraria y la Contraloría. Varios miles de burócratas se irán a la calle y no serán contratados por otras dependencias ya que se congelarán plazas en todo el gobierno federal. El ahorro será de unos 20 mil millones de pesos anuales. También anunciará un programa de austeridad drástico en todas dependencias federales. Le han recomendado acabar con las delegaciones federales del Ejecutivo y disminuir los bonos por “puntualidad” o “asistencia” que aparecen como prestaciones en algunas dependencias. También pedirá “respetuosamente" a gobiernos, municipios, partidos políticos, IFE, tribunales, Corte y congresos, hagan lo mismo. ¿Estaré soñando o va en serio? Si es realidad, ¿atenderán la recomendación el resto de los mexicanos? Así sí, cuenta con mi apoyo el Líder del Ejecutivo.

En el inicio de la 61 Legislatura, en sesión de Congreso General, los diferentes partidos expresaron posicionamientos llenos de críticas, principalmente en materia económica. En su intervención, la priísta Luz Carolina Gudiño exigió al titular del Poder Ejecutivo “revisar la estrategia de seguridad pública hasta ahora seguida, porque por ninguna parte se observan resultados sustantivos”. Demandó también menos gastos en publicidad y más en inversión social, así como menos salarios y prestaciones a funcionarios de los tres poderes. En representación del PRD, Alejandro Encinas dijo que “aumentan el deterioro social y político, y los riesgos de inestabilidad, por el desmantelamiento de los esquemas solidarios de seguridad social y por la fallida estrategia del combate a la delincuencia”. Por el Partido del Trabajo, Porfirio Muñoz Ledo propuso un viraje en el ejercicio político del gobierno federal y en su estrategia económica: “El dinero hay que tomarlo donde abunda, no arrebatarlo a los desposeídos, sino a las grandes empresas que eluden impuestos, a la banca desnacionalizada, a la alta burocracia y a los fondos ociosos de las arcas públicas”. El Informe fue entregado por el secretario de Gobernación, Fernando Gómez Mont, en un acto protocolario que duró 2 minutos con 35 segundos

Hoy a mes y medio de que el presidente Felipe Calderón hizo el anuncio del programa de Renovación Vehicular, cuenta con menos de 15 días de operación y materialmente medio centenar de créditos comprometidos. El anuncio se hizo el 15 de julio, las reglas de operación fueron publicadas el 21 de ese mes, los recursos se liberaron el 3 de agosto y las operaciones formales arrancaron del 13 de este mes. Derivado de ello, hasta ahora se cuentan con mil 500 consumidores registrados y unas cuantas unidades destruidas en las empresas destructoras. El programa consiste de dos fases, la primera es la inscripción y desarrollo logístico, misma en la que se considera la inscripción de las firmas productoras de automóviles, en donde ya participan General Motors, Nissan, Volkswagen, Chrysler, Ford, Toyota y Honda. En esta misma fase se considera la definición de los procesos que deben seguir las distribuidoras y empresas destructoras. Una vez más las comparaciones son odiosas, pero mientras que en México los estímulos son de mil 160 dólares (15 mil pesos) para quien destruya su unidad con más de 10 años de antigüedad, en Estados Unidos, es de hasta 4,500 dólares (poco mas de 50 mil pesos) y sin tanta reglamentación. En EU el plan conocido como “efectivo por tu carcacha”, terminará hoy luego que su éxito amenaza con acabarse los fondos mucho antes de lo esperado. La administración del presidente Barack Obama inicialmente esperaba que el programa de 3,000 millones de dólares durara hasta el 7 de septiembre. Como dato, México con economía “región 4” sólo destinó 19.3 millones de dólares (algo así como 250 millones de pesos). Mientras acá es sólo para carcachas vendidas desde nuevas en México, en EU sólo tienen que cambiar su vehículo por autos con un uso más eficiente del combustible. ¡Vaya habilidad de Gerardo Ruiz Mateos, secretario de Economía para echar a perder un programa que en esencia es noble aunque sea para ayudar a vender autos a empresas extranjeras (aunque mexicanas en su constitución de sus armadoras)!

Al conocerse en reuniones con sus “amigos” que Rafael Acosta, el Juanito de López Obrador, aspiraba a mantenerse en el puesto de jefe delegacional en Iztapalapa, desobedeciendo las "órdenes" del pejecrazy, de inmediato empezaron amenazas de muerte en su contra. El deseo del dictador tabasqueño era que Juanito tomara posesión de su cargo y de inmediato nombrara a Clara Brugada como secretaria de gobierno y al renunciar éste la otra ascendía al puesto. Este es un ejemplo en donde la ilegalidad debe aplicarse por capricho de un solo hombre que no respeta la ley y la voluntad de los que acudieron a las urnas. Que si votaron por Juanito por esa era la maniobra de Andrés Manuel López Obrador para quedarse con el poder en la delegación, la verdad es que muchos votaron también a favor de Rafael Acosta. Ese debería ser el poder del voto. El es el jefe delegacional y el debe acudir a su responsabilidad. Buscar escondrijos leguleyos por un capricho, es un insulto. La política en México confundiría al mismo Franz Kafka, escritor checo que mezclaba la realidad y la fantasía. Es contradictoria y va, incluso. Contra natura. La voluntad del pueblo no importa. Un cacique de la política es el que impone reglas, al margen de la Ley. Al final de cuentas, como ocurre en otros aspectos de la vida política del país, Juanito venderá por unas posiciones su puesto a las ambiciones de un grupo que le ha hecho mucho daño al país. Este país donde los políticos son los primeros en violar la ley, impera la impunidad. En ocasiones me pregunto qué hubiera pasado si hubiera ganado la presidencia López Obrador. Chávez se quedaría como aprendiz.

Después de conocer la determinación de la Suprema Corte de Justicia de liberar a 20 de los indígenas presos por la matanza de Acteal, ya que sus sentencias se basaron en pruebas y testigos fabricados por la Procuraduría General de la República, que en aquel entonces, en la administración de Ernesto Zedillo, encabezaba Jorge Madrazo Cuéllar, ratificó por enésima vez, mi decepción por la impartición de justicia en el país. Desde la fabricación de culpables en las procuradurías de justicia y las policías, hasta las procesos corrompidos ante jueces locales y federales así como la lentitud y la manipulación política en la Corte, nos habla de un país que en materia de justicia, está en la edad de piedra. Me duele como mexicano el grado de impunidad con que se maneja el gobierno ante la necesidad que hace la diferencia entre una verdadera democracia y una nación incivilizada. Hoy, nada mas falta que sigamos con el Código de Amurabi, de hace 8 milaños: Ojo por ojo, diente por diente y no con leyes que defiendan a la sociedad de sus agresores. Ejemplos, todos conocemos cuando menos una docena.

Las cifras son devastadoras. Cae la producción 10.6% en junio; las remesas se desploman casi un 20%; la producción petrolera cae un 70% y a duras penas se mantiene un nivel honorable de la exportación de crudo, la balanza comercial tiene un déficit mantenido durante meses; tenemos una recesión galopante que mantendrá un boquete oficial de 780 mil millones de pesos para fin de año, las reservas monetarias cayeron 12 mil millones de dólares y, por si fuera poco ahora anuncian aumento en impuestos y en el endeudamiento.

La nota la dio la Policía Federal, de Gerardo García Luna, al detener al Dimas, un sicario y administrador de una de los cárteles del narcotraficantes. Precisamente, mientras se desarrollaba la fastuosa reunión trilateral entre Harper, Obama y Calderón, la Secretaría de Seguridad Pública daba a conocer de un atentado contra la vida del presidente mexicano, que se desbarató “milagrosamente”. En la “cumbre del Nafta” o de América del Norte, la agenda fue fijada por el gobierno de Estados Unidos y los mexicanos así como los canadienses sólo escucharon “la línea” tirada por el país mas poderoso del mundo. Así son las cosas, han sido siempre y así serán en el futuro. Resignación. Pero, para que las candilejas coincidentalmente, no creo en las coincidencias, alumbraron a Calderón con este atentado frustrado. En fin, contrastes políticos y policíacos.

Ante los afectos de la crisis internacional y la falta de medidas oportunas y contundentes del gobierno para enfrentarla, ahora la administración calderonista toma medidas desesperadas ante la caída de la captación fiscal, el derrumbe de los ingresos petroleros y las remesas de los paisanos en Estados Unidos, el abultado costo del despilfarro en gasto corriente, así como en personal de confianza de la burocracia y la falta de resultados de la sindicalizada. Así muchos proyectos de infraestructura quedarán inconclusos y se suspenderán apoyos sociales por falta de recursos. La semana pasada, la Secretaría de Hacienda, que encabeza Agustín Carnstens, envió a todas las dependencias federales oficios para presentar varias medidas para controlar el gasto público y evitar que el gobierno de Felipe Calderón quede insolvente. No importa a quien se afecte, si son programas sociales o de infraestructura, o si se trata de pagos de trabajos hechos con anterioridad. Se congela el gasto público y no hay, a partir del viernes pasado, contrataciones laborales. Además, se quedan congeladas las plazas que hasta esa fecha hayan quedado vacantes y, por si fuera poco, los pagos a proveedores también se quedarán suspendidos y sólo se mantendrá el gasto corriente. Pero, por si fuera poco se congelan el gasto de todas las dependencias y, por primera vez en la historia de la administración pública federal, las dependencias deberán regresar el dinero que no ha sido usado o subejercido. Si algún funcionario retiene el dinero en fondos, fideicomisos o cualquier otro instrumento, deberán pagar intereses de la Tesorería. El boque que tenía al cierre del primer semestre del año el gobierno federal era del orden de los 335 mil millones de pesos. Pero la inmovilidad de varias dependencias de gobierno, llevan a la desesperación ante la falta de recursos. La situación es caótica.

Terrible el comentario que hizo el presidente removido de Honduras Manuel Zelaya en una reunión con pejistas al tocar una de las células mas sensibles de la política mexicana. Dijo: “en estos país mas vale sentirse presidente que serlo…” refiriéndose a Andrés Manuel López Obrador que se siente preside “legítimo”. Este revés de Zelaya llama a una reflexión sobre la secretaría de relaciones Exteriroes. No es posible que en aras de crear simpatías con el grupo de presidentes ilegítimos y dictadores aliados al Alba, alianza bolivariana, el gobierno mexicano trate de quedar bien con el dictador “democráticamente electo” Hugo Chávez de Venezuela. Las mentiras de estos presidentes llevan al escándalo y por si fuera poco, hasta llegamos a creer que muchos presidentes de la región que apoyan a Zelaya, lo hacen con el fin no verse en ese espejo. Lo claro, es que en México no hay canciller aunque cobre ahí Patricia Espinosa.

Manuel Zalaya, presidente hondureño removido por haber violado la constitución de su país, llega a México para buscar apoyo de Felipe Calderón. ¿Ahora nos convertimos en tapadera de líderes políticos que bajo los auspicios de Hugo Chávez, pretenden crear una red de dictadores "del proletariado"? La secretaria de Relaciones Exteriores de México, Patricia Espinosa, realmente está en la locura de apoyar a los grupos de izquierda aunque esté en riesgo la seguridad nacional.